Otra semana en la instancia. He estado muy desconectado, y es que entre el trabajo y que me mudé, se me consume el tiempo en el poco ocio que puedo desplegar. Reddit en español es un chiquero asqueroso; así, días me di una vuelta y me di cuenta de que los buenos comentarios se pierden en un mar de caca [pongan la escena de 31 Minutos: “Nunca había visto tanta caca junta”].

Ha estado haciendo calor donde vivo y se me ocurrió limpiar la compu, pero al quitar el disipador de calor (o toda la parte con el cooler fan), ya no entraban los tornillos; como que el resorte no permitía bajar. Me dio un ataque/desesperación de dos horas tratando de reparar eso o resignarme a no tener mi PC por algún tiempo. Y es que es vieja, la armé antes de la pandemia, tiene un Ryzen 5 muy viejito pero sigue funcionando bien y me gusta. Lo que no me gusta es la mobo que trae periferia como del 1999. Al final la pude volver a poner, forzando mucho el aplanado para que estiraran los resortes; por un momento pensé que la rompía.

Traigo la picazón de buscar una Play 2 Ocean Blue:

Nunca tuve PS2, solo tuve consola hasta el 3DS; era pobre, mi familia no podía costearse regalarme un videojuego de ocio cuando el techo se estaba cayendo, jaja.

Me sorprende mucho el elevado precio del mercado de videojuegos viejos; han aumentado su precio. Ahora veo en mercaditos locales (puestos) gente vendiendo videojuegos a precios de PriceCharting (cuyos precios son promedios de eBay). Asqueroso cómo giró el mercado de coleccionismo retro-gaming.

Mi huerca crece y a veces me preocupa el “brain rot”. Hablaba con los amigos de mi hija y a veces me preocupa su falta de curiosidad; eso, o soy viejo y ya estoy en el modo: “en mis tiempos todo era mejor”.

Ahora resulta que el gobierno quiere controlar las telecomunicaciones; por eso ya no veo noticias.

Bonito fin.